Los territorios de la palabra” de José Luis Abraham López: El oficio de leer y de nombrar

 

El oficio de leer y de nombrar

Los libros que nacen de la pasión lectora son territorios de asombro donde el lector, hecho crítico, vuelve a narrar su propia vida. Los territorios de la palabra, el volumen que José Luis Abraham López publica en Ediciones Amaniel, es exactamente eso: el mapa de cinco años de lecturas reunidas en reseñas y entrevistas que antes ocuparon las páginas del suplemento IDEAL en Clase del diario granadino El Ideal. Cien textos que ahora se reúnen como testimonio y como invitación, como memoria crítica y como bitácora de navegación por el paisaje literario actual en lengua española.

El autor advierte desde el prólogo que no escribe desde la mirada académica ni desde la distancia del especialista, sino desde la intimidad del lector apasionado que comparte su curiosidad por la literatura y todo lo que late a su alrededor. Esa honestidad define el tono del libro, su temperatura. Abraham López practica una crítica impresionista, subjetiva, comprometida con la experiencia personal antes que con la taxonomía del análisis técnico. Sus textos nacen de una premisa sencilla pero cada vez más urgente: defender el valor insustituible de la lectura pausada, analítica y emocional en un tiempo caracterizado por el exceso de información de dudosa credibilidad y el consumo voraz de contenidos superficiales.

Buena parte de estas páginas se escribieron durante la pandemia, y esa circunstancia no es trivial. El confinamiento puso de manifiesto la fuerza y la relevancia de la lectura como refugio, resistencia anímica y moral, conexión con los demás. Muchos de los libros reseñados durante aquellos días sirvieron tanto de consuelo como de goce, de lucidez como de desahogo. Abraham López consigue transmitir esa doble función de la literatura: estética y vital, cultural y existencial. Lejos de pretender fijar un canon o definir tendencias, traza un mapa personal de lecturas, una memoria de afinidades electivas donde conviven firmas consolidadas junto a autores incipientes, propuestas experimentales junto a narraciones clásicas en su estructura pero audaces en su mirada.

El denominador común es el compromiso con la palabra y la voluntad de recorrer rutas fascinantes por el intrincado paisaje de la literatura actual en lengua española. El libro abarca narrativa, poesía, literatura infantil y juvenil, cómic, ensayo divulgativo, novela gráfica. La variedad de géneros abordados no diluye el propósito de una escritura crítica flexible, más orientada al diálogo que al veredicto severo, más interesada en potenciar las interpretaciones que en proclamar sentencias. Abraham López opta por un tono divulgativo y una exposición clara, evitando lo simplificador sin renunciar a cierto grado de profundidad analítica. Su propósito no es practicar una crítica implacable sino destacar el valor temático, formal y estilístico de quienes han despertado su interés.

Los temas tratados en las obras comentadas resultan variados: la identidad personal y la memoria, los conflictos familiares y las relaciones afectivas, las problemáticas sociales y existenciales, la crítica institucional. En poesía predominan la reflexión existencial y metafísica, la memoria, la infancia, el compromiso estético y cultural. La literatura infantil y juvenil se presenta como amplio campo para la educación en valores a partir de temas actuales: acoso escolar, identidad de género, empatía, respeto a la diversidad. El ensayo acoge el testimonio personal, la memoria cultural, el feminismo, la maternidad. Estas temáticas confluyen en líneas transversales recurrentes: la tensión entre verdad y ficción, la ciudad como personaje literario, el sufrimiento como motor de transformación personal, el amor y el desamor.

Una literatura comprometida con la realidad, atenta a los márgenes, sensible a las fracturas del presente: la crisis económica, el racismo, la xenofobia, la desigualdad de género, el desarraigo emocional, la pérdida de memoria. Una literatura que se ofrece como espejo de la incertidumbre creciente, de los desasosiegos contemporáneos, de las heridas individuales y colectivas que atraviesan nuestro tiempo. Abraham López apuesta por editoriales independientes, algunas jóvenes y valientes, otras ya asentadas, todas ellas con un compromiso férreo con la palabra y con las nuevas voces.

Entre los autores reseñados encontramos nombres como Nando López, Rodolfo Padilla Sánchez, Eimear McBride, Francisco López Porcal, Pilar Tena, Toti Martínez de Lezea, Ricardo G. Manrique, David Machado, Daniel Guebel, Víctor Álamo de la Rosa, Roberto Gallego, Federico Falco, Pilar Fraile, Juan José Saer, Florencia del Campo, Mario Álvarez Porro. Un catálogo que abarca desde la narrativa más comprometida socialmente hasta la poesía existencial, pasando por el thriller y la novela histórica. El volumen incluye también entrevistas a escritores y editores, convencido Abraham López de una verdad incuestionable: la palabra viva del escritor aporta claves que enriquecen la lectura y otorgan mayor credibilidad a la realidad cultural.

La escritura de Abraham López se caracteriza por su claridad expositiva, su capacidad para sintetizar lo esencial de cada obra sin caer en el reduccionismo, su habilidad para detectar los recursos formales y los hallazgos estilísticos. Maneja con soltura el análisis de estructuras narrativas, el comentario de personajes, la exploración de temas y símbolos. Su prosa combina precisión terminológica con imágenes evocadoras, reflexión crítica con impresiones personales. Especialmente interesantes resultan los textos dedicados a la poesía, donde despliega una sensibilidad particular para captar matices, resonancias, ecos de la tradición. Sus comentarios sobre autores como Mario Álvarez Porro o Florencia del Campo revelan una comprensión profunda del hecho poético, de la música del verso, de la imagen como revelación.

También destaca su capacidad para abordar la literatura infantil y juvenil sin condescendencia, valorando su dimensión formativa sin menoscabo de su calidad literaria. Abraham López reivindica la lectura crítica como forma de ciudadanía cultural, ejercicio de memoria y sensibilidad frente al lenguaje. En un tiempo como el nuestro, defender esa posición constituye efectivamente un acto de resistencia. Este volumen se inscribe en esa resistencia, en esa trinchera de papel desde la cual seguir creyendo que la literatura es compañera insobornable que nos incita a leer más, a pensar de otro modo, a mirar con mayor atención y a sentir con mayor hondura.

El libro se cierra con la convicción de que siempre hay un libro esperando a un lector sin hábito, de que la literatura posee una atemporalidad esencial más allá de sus temas y formas, de que leer no es solo acto de placer o introspección sino también de memoria y confrontación ante las urgencias de lo real. La literatura se revela así como ejercicio compartido de conciencia y transformación. Los territorios de la palabra es, en definitiva, un libro necesario. Necesario para quien desee cartografiar el panorama literario actual en lengua española, necesario para quien busque orientación en el maremágnum editorial, necesario para quien crea en la lectura como acto de resistencia y belleza.

José Luis Abraham López ha trazado un mapa personal que funciona también como mapa colectivo, como bitácora de navegación por las aguas de la literatura contemporánea. Cinco años de reseñas literarias y entrevistas conforman el tejido de este volumen que se ofrece como memoria de un periodo marcado por crisis globales, transformaciones editoriales e irrupción de nuevas voces. Funciona también como invitación a tomar conciencia de la riqueza y pluralidad del panorama literario actual. Y funciona, sobre todo, como testimonio de una pasión lectora que se resiste a la frivolidad, al consumo acrítico, a la dictadura del best-seller.

Abraham López practica el oficio de leer y de nombrar con honestidad, con rigor, con generosidad crítica. Sus textos nacen de la curiosidad y del asombro, de la voluntad de compartir la pasión por la lectura en un tiempo caracterizado por la superficialidad informativa y la prisa. Defender con honestidad el valor insustituible de la lectura pausada, analítica y emocional es, en palabras del autor, un acto de resistencia. Este volumen se ofrece como esa trinchera desde la cual seguir celebrando la literatura, desde la cual seguir creyendo que siempre hay un libro esperando, que la palabra es territorio habitable, que leer nos transforma.

Antonio Graña Ojeda